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Elio Toffana, Dano & Ébano ‘Cuento sin Moraleja + Joven Jugador’ – El camino de AQT hasta el X Aniversario de «El Veneno»

Este 2024 Ziontifik celebra, de la mano de MÉCÈN Ent, los 18 años de la publicación vía GasOil Records de Jóvenes Bajo Presión de Elio Toffana. Lo hacen con el lanzamiento de una edición en vinilo (ya agotada) y una camiseta que todavía estás a tiempo de pillar, y nuestra forma de contribuir al festejo es compartir esta grabación de «Cuento Sin Moraleja», el feat de Dano en el disco, con la intervención especial de Ébano rapeándose «Joven Jugador» de su álbum colaborativo con Louis Amoeba Last 2 People On Earth que saldría un año después.

Aquel noviembre de 2019 el colectivo Ziontifik celebra en la Sala Gotham (antigua Sala Penélope) el décimo aniversario de El Veneno, el primer disco de Acqua Toffana que vio la luz en 2009 por Ziontifik Music en colaboración con Zona Bruta y con el apoyo logístico de Warner Music. Ese mismo año fue número 1 de discos de rap en FNAC y número 7 en general, disco y artista de la semana en Myspace Music (plataforma en la que se estrenó el disco) y aparecieron en cartel -dos años consecutivos-  en el festival Cultura Urbana, eso ubicó a AQT y al colectivo Ziontifik como una propuesta seria dentro de la industria, si es que entonces se le podía llamar así viendo lo de ahora.

Pero a principios del 2000 todo el proceso era mucho más simple e inocente y al mismo tiempo la tarea de recoger lo sembrado era mucho más ardua. Se comprueba que sólo los que lo hacían convencidos de corazón han llegado hasta hoy. No hacen falta fotos para transportarse a aquellos días porque la fuerza era tal que esas imágenes quedaron grabadas en nuestras retinas por siempre. Sin embargo daríamos lo que fuera por poder volver a alguno de esos primeros bolos en los que ponías cara, actitud y vestimenta a los jóvenes bajo presión que habían creado un mensaje tan potente, intuyendo las historias que hay detrás de sus textos.

La primera vez que asistí a uno de sus conciertos fue el viernes 16 de diciembre de 2005 en la sala Film Factory en Avenida Polvoranca, Alcorcón, respaldados por DJ Dstro y con invitados aun más en el underground como Sanfrutos o Joka de Guante Blanco. El sonido fue pésimo y la preparación la justa, pero el impacto vino al ver tanta gente anónima subida a una escenario ¡y sin rapear! Eran las mismas decenas de amigos que copaban las primeras filas de todos sus shows y sólo acudían a arroparlos a cualquier precio, a representar.  Así lo demostraba la intro de El Veneno, cuya trascendencia más importante fue que, a pesar de la advertencia de que no había antídoto, ya había sido inoculado en muchos jóvenes a los que la narrativa general del rap español ya no representaba, hasta el punto de aparecer numerosas cuentas de correo y usuarios de foros con el apellido Toffana.

El disco del que se celebran 10 años en la Sala Gotham supuso la consolidación de una trayectoria trabajando en la independencia y desde el respeto a la cultura más allá de lo musical como reflejan sus portadas, vídeos, dress-code y las meta-alusiones en su arte o en su web. Aunque su estética hoy es reconocible e influencia en la calle y la escena, paradójicamente su primera referencia musical conocida es una demo pirateada que apareció de forma misteriosa, sin portada ni acompañamiento visual, compartida en 2003 en plataformas como SoulSeek y enlaces en los (benditos) foros de HipHopHispano, HHZpain o HipHopFlash. Todavía hubo gente que recordaba aquella demo en la Sala Gotham en 2019 donde el público pidió «Cuando Aprendiste a Querer», y Elio respondió tirándose su trozo a capela.

Resulta imposible poner a sonar la maqueta de Acqua Toffana y no sentir el vello erizarse al escuchar las primeras notas de ese piano y las voces de Elio y Kael calentando según van entrando bombo y caja. Han pasado más de 20 años desde entonces y la sensación sigue siendo la misma. Si lo viviste en el momento, la nostalgia es el ingrediente definitivo para que afloren muchos recuerdos de esa época.

«Si las únicas coronas de espino que vimos fueron de flores sobre nuestros seres más queridos muertos, no llores, porque cuando estaban vivos sus coronas eran de espino». A menudo me pregunto qué falla en el sistema para que un chaval menor de edad, con una sensibilidad desbordada para transmitir esas imágenes, escriba esos versos y, en lugar de ser becado para una academia literaria o musical, tenga que nadar a contracorriente para hacer llegar su arte. Afortunadamente el tiempo pone todo en su lugar.

La promo hoy popularmente conocida como AQT, pese a no tener vocación de ser lanzada como la escuchamos, traía un aire fresco a una escena en la que por un lado todos se creían poetas y por otro el público general no entendía Ley Rico ni profundizaba tanto como para llegar a La Conektha. Las barras crudas y líricamente cuidadas hicieron mella en los barrios obreros llegando a una clase media-baja que se veía identificada con su storytelling, valoraba sus referencias a la cultura clásica, y comulgaba con su mensaje de clase que se alejaba del panfleto al que estaban acostumbrados. Aquella maqueta que convirtió a Acqua Toffana en la voz de los barrios de la periferia y el extrarradio, estaba producida por un joven Dano que ese mismo 2003 mostraba su enfoque instrumental en Metamorfosis (The Kaiser remixes). Un año después, la gente pudo poner imagen a ese misterioso grupo con la publicación del videoclip de «Hijos Bastardos» de Elio Toffana.

Para hablar de «Hijos Bastardos», su influencia, destacar determinadas barras, las localizaciones, las pintas y contextualizar todo nos haría falta otro artículo aparte. Nosotros nos quedamos con el valor humano, la autenticidad y el altruismo de las personas que realizaron y aparecieron en el clip, algo que se puede apreciar mucho mejor en el making of del clip bajo estas líneas. Descansa en paz Jor Toffana aka Bolita.

Comprobé personalmente la fuerza de esa amistad en la actuación de Toscano el 3 de febrero de 2006 en la Sala Siroco, cuando la estrecha calle San Dimas se abrió entera para dejar paso a una legión del Paseo de Extremadura con los calcetines por encima de sus chándales Lacoste encabezada por Elio. Como si fuera una Polaroid que sostengo entre mis manos veo a Toscano enfundado en su Chevignon invitar al escenario a Joka y Elio, que exhiben orgullosos el colorao que cuelga de sus cuellos mientras DJ Arac suelta la base y suenan los temas de sus respectivas maquetas. La pelea encarnizada que puso fin al bolo pasó a la historia, pero el relevo generacional ya estaba en marcha.

La siguiente entrega del colectivo Ziontifik sería la ópera prima en solitario de Elio Toffana Jóvenes Bajo Presión (2006 – GasOil Records). Un salto de calidad en cuanto a sonido y edición por motivos obvios, pero también en las formas musicales, confirmando al mc de Aluche como uno de los cronistas de las calles con más personalidad del momento sin dejar la profundidad existencial, y a Dano como un productor capaz de diseñar musicalmente un trabajo con un sentido global. Esta vez además de reportar las vidas de extrarradio se introduce en el mensaje cierto positivismo y afán de superación como filosofía para romper con la jaula, parafraseando el outro de Lucas Albor, una postura permanente desde entonces en el trabajo de Ziontifik.

Este primer EP de Elio se presentó el 7 de febrero de 2007 en la Sala Arena de Plaza España (antigua Heineken, Marco Aldani, etc.) y fue a la vez el estreno del sello GasOil Records que puso sobre la tarima sus otros dos fichajes indies. Es difícil olvidar las miradas atónitas del escaso público, formado en su casi totalidad por gafapastas, clasistas escondidos tras el antifaz anterior de los hipsters que hoy les abren sus medios. Toma tanto.

Ese mismo año 2007 Dano lanzó el heterogéneo Cierra los Ojos editado por Background Records, sello regentado por Killer B. Su primer LP autoproducido que sirvió de soulfood para aquellos que demandaban más música suya tras escucharle en el «Cuento sin Moraleja» que motiva este artículo. Como el mismo Dano ha declarado, venir de familia de músicos es lo único que le diferenciaba del resto de sus compañeros, y el disco lo demuestra pues colaboran su madre Mavi Díaz y su padrastro El Gonzo al saxo. Por su parte, el álbum también sirvió de presentación para Unai, Nethone y Kuma, que ganarían relevancia junto a Cabal en Golosinas (2007 – Ziontifik Music) y posteriormente editarían y formarían parte de trabajos bajo el manto del colectivo.

El Veneno, el ansiado disco del grupo cocido a fuego lento y retrasada su salida en más de una ocasión por los problemas de siempre, por fin tenía una fecha: 17 de noviembre de 2009, y los CNK la anunciaban en graffiti en las paredes del centro de Madrid tras sus periplos nocturnos de fin de semana.

La espera era tan irritante que la premier tuvo lugar 10 meses antes de llegar a las tiendas. El 17 de enero de 2009 acompañados de Ratas Inestables en la sala Barracudas también colgaron el cartel de aforo completo. Aquel mes el Estado de Israel aceleraba el genocidio en Palestina y sólo me falta el calor asfixiante de aquella sala abarrotada para sentir a un par de metros a Kael y Elio, con náuticos, Barbour y un pañuelo palestino sobre los hombros concienciando a la masa: «los chicos automáticos levantan el puño, conocen el problema sionista, los chicos automáticos levantan el puño, y en su receta del médico pone «pensionista»». #PalestinaLibre.

El veneno ya había calado en una generación y Ziontifik, abanderados especialmente por Dano y Elio Toffana, hoy recoge los frutos de una siembra sin más pretensión que el amor por la cultura y la satisfacción personal de la creación, lo que inevitablemente tras tantos años de dedicación les ha supuesto otras mieles. Desde el lanzamiento de Black Ops en 2012 con el apoyo de Warner Music y sus excelentes 12 piezas musicales y audiovisuales, la música les ha llevado a girar por España y Latinoamérica en contadas ocasiones, con alrededor de dos docenas de álbums, EP’s y maxis que les han hecho ganarse un merecido hueco en la industria, por la que todavía se abren paso a base de constancia y actitud. 

Texto por BigBrothaBob co-starring Dasar
Fotografía destacada (montaje) por Fernando Mendoza
Resto de fotografías por minarai de lxsyeyestribe

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