Grandmaster Melle Mel & The Furious Five – Step Off
(1984 – Sugarhill Records)
Al más puro estilo Jazz Voyages tiramos del hilo de Sylvia Robinson, quien protagoniza la cuña que abre Three Months Alive, para seguir dando vida a nuestra sección Sevens & Twelves. Principalmente porque consideramos a Sylvia una figura trascendental en el desarrollo del rap, y aunque trataremos su vida y trayectoria en profundidad cuando corresponda, ya iba siendo hora de dedicarle unas líneas en la web. Sintetizando, Sylvia Robinson era una chica de Nueva York que sobre finales de los ’50 y principios de los ’60 empezó a meter su hocico en el negocio musical, hasta que en 1973 posicionó su single Pillow Talk (1973 – Vibration) en la tercera posición de las ventas de la famosa lista Billboard, además de ser galardonado con el Disco de Oro (más de 500.000 copias vendidas) ese mismo año. Eso en cuanto a datos, en cuanto a composición aquella canción ardiente –“What I’m teaching you tonight boy, you’ll never learn it in school”– sería en cierta parte pionera de esos gemidos onomatopéyicos en la música negra, pero al grano. La relación de Sylvia Robinson con el rap vendría años después en Harlem, concretamente en 1979, cuando gracias al dj de una fiesta de cumpleaños Sylvia quedó prendada por ese sonido. Aquello fue amor a primera vista, y a su vuelta a Englewood (Nueva Jersey) dónde tenía sus oficinas, Sylvia salió a cazar a algunos de los chicos del barrio que había visto rapear en las esquinas. Ese mismo año fundaba Sugar Hill Records, comandado por la Sugar Hill Gang (Master Gee, Big Bang Hank y Wonder Mike), quienes lanzaron Rapper’s Delight, que se convirtió en el primer single de rap que consigue Disco de Diamante (más de 5 millones de copias vendidas), firmando prácticamente el nacimiento de los grandes sellos independientes del rap. Me gustaría poder hablar de ese 7” de “Rapper’s Delight” (1979 – Sugar Hill Records), o incluso de otro de los grandes éxitos del sello, también producido por Sylvia Robinson, “The Message” (1982 – Sugarhill Records) de Grandmaster Flash & The Furious Five, pero dado que para esta sección me gusta escribir de lo que tengo en mi poder, vamos con “Step Off”, responsabilidad de Melle Mel, que es realmente el responsable de The Message, ya que el resto del grupo no tenía demasiado interés en hacer un tema así (cosas de la vida).
SIDE A & B: Step Off
La pasta trae problemas hasta en las mejores familias, y los royalties de The Message tenían muchos ceros. Grandmaster Flash demandó a Sugar Hill por un mal reparto de los beneficios, sumamos líos de autoría en canciones, y el conflicto acabó con Flash abandonando el sello rumbo a Elektra Records junto a Kidd Creole (hermano de Melle) y Raheim. No obstante, The Furios tenian tirón, y el resto de la formación decidió seguir con el proyecto pero esta vez con Melle a la cabeza, y los otros dos miembros restantes: Cowboy y Scorpio. Un cambio sutil en el nombre y funcionando, Grandmaster Melle Mel & The Furios Five. El primer largo del grupo se llamaría igual que la formación y saldría en 1984 por Sugar Hill, manteniendo algunos contenidos comprometidos como en White Lines (con clip dirigido por un joven Spike Lee). Step Off es el primer single tras la salida de este segundo disco. En este caso nos va a ser indistinto analizar ambas caras juntas que por separado, pues el mismo tema abarca ambas caras. La única diferencia es que la primera tiene rapeos de todos los miembros de esta nueva formación; y la cara B es a cara perro de Melle Mel, con final repitiendo los versos de amor a Chaka Khan (en tributo a su feat en I Feel For You que le valió el Grammy a la grabación del año) y cerrando con scratches. Las letras no siguen la línea de The Message, van más de chorbas, combate raperil, y amasar fortuna pero Melle si hace referencia al histórico corte –«I’m like shakespeare, I’m a pioneer / because I made rap somethin’ people wanted to hear». Step Off volvía a poner una grabación de Sugar Hill en el circuito mediático mainstream, aunque eso no significó que Melle dejara sus líricas comprometidas como demuestra Jesse (tributo al sample de usado en The Message incluido) dónde más o menos venía a pedir el voto para el Reverendo Jesse Jackson. El ritmo bailongo lo firma Sylvia Robinson, que apoyándose sobre el groove del bajo de Anthony Jackson en For he Love of Money consigue un ritmo bastante disco. Tiempo después la formación original se volvería a juntar para lanzar “On the Strength” (1988 – Elektra), pero ya se sabe cómo suelen resultar estas cosas…
Vaya temazo chaval.
Ya lo bumpearemos en no se qué afterparty, ¡ya tú sabes!