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Impresiones de una adicta en la Feria del Disco, Barcelona 2013.

fira del disc

 

Hace tiempo que sabes que ese fin de semana es la Fira del Disc de Barcelona, se hacen varias al año en la ciudad, pero esta es la mejor, la más grande. Llevas días cumpliendo tu planning de ahorro para no quedarte con las ganas de pillarlo todo.

Hoy es el primer día, quieres llegar pronto por si algún listo se adelanta y se compra algo que te interesaba, pero por una cosa o por otra, no puedes ir por la mañana. Coges el tren para llegar a primera hora de la tarde, te bajas con la sonrisa del que sabe que puede ser una gran tarde, con la inquietud de un bebé prematuro que quiere ver ya la luz, los nervios de un niño que se va a declarar a la guapa de la clase y las ansias del yonki que se dirige al punto de venta. Mientras caminas, vas mirando las bolsas de la gente que ya sale, como si tus ojos dispusieran de rayos X para poder ver el interior, pensando si ese capullo te habrá robado algo que era para ti.

Has llegado, sacas la pasta para la entrada, pones tu peor cara porque te gustaría gritar: ¡¿Qué mierda es esta de pagar entrada aquí?! Joder… esos seis euros (cinco con el Carnet Jove) querías gastarlos dentro… Además la entrada sólo es válida para un día, no es justo. Entras y te da en la cara ese bendito olor a plástico, a cajas polvorientas, aspiras, ese es el ambiente donde lo gozas, el hospital para los enfermos de la música. Te subes las mangas, ha llegado la hora de mancharte las manos de polvo, de levantarte medio mareada después de un buen rato agachada mirando las cajas del suelo, de forzar la vista para leer los lomos de los CD’s, de aguantar tiempos récord de puntillas y estirar los brazos hasta límites insospechados para poder llegar hasta el vinilo de más al fondo. Es tu momento digger, el de verdad, el de pasar discos con tus dedos y no a click de ratón, el de amontonar una primera selección a tu lado en lugar de acumular pestañas abiertas en el explorador. Es tu momento para disfrutar, porque comprar discos por Internet está bien al tener acceso a prácticamente todo, pero esto es otra cosa, esto tiene el verdadero encanto.

Comienzas la vuelta de reconocimiento y te das cuenta de que algunos habituales este año, como el anterior, no han puesto su stand, la jodida crisis. Por no haber, este año no hay ni subasta. Ves todo el merchandising que tienen para los amantes del rock, del heavy, la exposición con un montón de pijadas de Mike Oldfield y piensas: Quién coño me manda escuchar música de negros… Eres consciente de que te va a costar encontrar discos de lo que te gusta, pero eso ya lo sabías, no es tu primer año, te va a tocar rebuscar como histéricas en las rebajas, olfatear como perro hambriento, eso no importa. Mira, al menos ha venido el de aquella tienda guiri y el de la otra, hay esperanza.

Te das cuenta de que cada año hay menos gente comprando, es una lástima. Te paseas y ves esas pestañas de “black” o “rap/hip hop” escondidas detrás de los stands -nos tienen algo marginados- y te lanzas a la desesperada, si hay alguien metiendo los dedos antes le miras mal, le presionas, le miras de reojo no te vaya a quitar lo que es tuyo…

A la vez, piensas… Idiota, ¿qué posibilidades hay de que se te adelanten? Hay muy poca gente que escucha rap ahí dentro, es evidente. Siempre somos los mismos. Levantas la cabeza y te encuentras con Hartosopash, cosa que sólo te sorprende porque no es de Barcelona. Entonces te preguntas ¿Joder, dónde están hoy todos esos otros que últimamente graban videoclips en tiendas de vinilos? Bah… si la mayoría han comprado cuatro discos en toda su vida y son los mismos que luego se quejan cuando la gente no compra el suyo. Hipócritas egocéntricos… grabad un videoclip en vuestra habitación, así vemos qué tenéis en vuestras estanterías y después ya veremos si os podéis quejar de las ventas de vuestros trabajos…

Y todos esos que inundan la red con sus fotos en tiendas de discos para demostrar lo guays que son, ¿dónde estaban hoy? Mira que por un módico precio de cinco euros, tenían ubicaciones a montones para rellenar sus álbumes de Facebook. ¿No hay peña que pagó 100 euros por hacerse una foto con la Badu la última vez que vino por aquí?

Bueno, tu a lo tuyo, después de rebuscar y pillar aquellos discos que deben comprarse nada más verlos o de lo contrario podrías arrepentirte durante toda tu vida y perder horas de sueño, haces tu recuento mental de todo lo otro que has visto en cada puesto y te invaden las preguntas y líos mentales… ¿Me compro éste o éste? Aquel maxi creo que existe con portada, joder si lo consigo con portada triunfa mucho más… Uf, ¿seguro que esto lo voy a volver a ver? Hostia, creo que por pocos euros más me puedo pillar la edición original… De éste vi por Internet que sacaron una maldita box edition que me hace babear. Bueno va, si este álbum ya me lo compré en CD. Mierda, éste ya lo tengo pero viene con póster y vinilos de colores…. AAAAAAARGH ¡Soy una ansias, que se multipliquen mis billetes!

Al final te mentalizas: todo no puede ser, así que te pillas algunas joyitas, dejas otras porque ahora mismo tu bolsillo no te permite pagar 130 euros por ese disco que no volverás a ver en tu vida…  ¿y qué? Ya sabías que te iba a pasar, te conformas con saber que vas a la feria principalmente con la idea de pillar algo de rap francés -que no suele verse por muchos lares- y que este año había más del esperado a precios coherentes y que el hombre amable del stand te ha regalado uno por comprar en cantidad (no lloréis, no voy a detallar la lista de la compra) y también con esos discos de música negra que has rescatado ensuciándote entre las 15 cajas de cartón con el cartel de 1 disco x 1 euro. Benditas cajas... Pero también cuantas veces te has dejado llevar por el precio y, sin comprobar nada más, has vuelto a casa con discos rayadísimos o incluso rotos. Este año ha vuelto a pasar, seguro que muchos sabéis de lo que hablo, algún día aprenderemos.

Por otra parte eres consciente de que existe una parte negativa: aparte de tener que pagar entrada (y una por cada día que quieras ir), algunos vendedores (algunos) parece que están desganados y no se molestan en atenderte hasta el punto que te dan ganas de irte sin pagar, otros se aprovechan y suben los precios por encima de la media del mercado. No puede ser que me quieras cobrar 30 pavos por una reedición de Ideal J que hace pocos meses me compré por 16€. Entiendo que quieren amortizar el viaje, pero los que tenemos acceso más fácil a discos -internet aparte- por vivir en grandes ciudades, tenemos menos tentaciones de pagar esos precios, a no ser que sea algo que sabes que quizás no encontrarás más, pero otros pueden dejarse llevar por la desesperación de saber que se han desplazado hasta la feria porque donde viven no tienen facilidad para poder comprar música.

Durante tus paseos por los pasillos hablas con la gente, escuchas conversaciones de unos con otros, personas que te explican cómo han tenido que cerrar su tienda de discos de toda la vida y ya sólo van a ferias y que el año que viene quizás no vuelvan a poner su stand, no sale a cuenta…

Entonces tú te sientes bien, estás poniendo tu pequeño granito de arena para que eso no pase, pero no es suficiente, este tipo de eventos están, desgraciadamente, en peligro de extinción.

Todo esto te entristece y entonces te acuerdas de esos que están en su casa, del que hace música, de ese dj que no compra vinilos, del que dice que no puede ir a la feria (ni a conciertos) porque no tiene dinero, pero te lo dice con un porro en la boca, unas zapas de 150 pavos en los pies y una chupa de 400€. Irritante… Vamos hombre, entiendo que cada uno gasta su dinero en lo que quiere, pero no me pongas la excusa de la crisis y la pasta, dime que simplemente es cuestión de prioridades y que las tuyas son distintas de las mías.

¿Pero sabes qué? No deberías quejarte de que tu trabajo se venda mal. Piénsalo, quizás tu público también tiene otras prioridades.

Texto por Lady R

 

9 comentarios en «Impresiones de una adicta en la Feria del Disco, Barcelona 2013.»

  1. Yo soy bastante asiduo a las ferias de discos de mi ciudad (Granada) pero con el tiempo me he ido desencantando por eso que dices de que algunos avispaos (muchos por aquí) aprovechan para subir el precio mucho más de la media de mercado. He hecho compras muy buenas y muy malas en esas ferias y con el tiempo he aprendido que, aunque te requiera estar más atento y dedicar muchos más fines de semana, salen mucho más a cuenta los mercadillos de 2ª mano que estas ferias.

    ¿Por qué? Sencillo, porque es muy fácil encontrarte con gente que no tiene ni idea de lo que está vendiendo y sales de sus cajoneras habiéndote gastado 6 euros en 8 vinilos que en internet se habrían puesto en 25 fácilmente (sin costar gastos de envío).

    Comprendo que en Barna las ferias tienen mucha más variedad y cantidad que aquí y las posibilidades son mucho mayores, pero yo, desde mi propia experiencia, ya voy más a ferias por cotillear y por las cajas de 1€ que por otra cosa. A comprar voy a mercadillos y a particulares, lo tengo claro.

    De todas formas lo mejor de estas ferias, en mi opinión, es la posibilidad de hacer contactos. No sólo con gente de tu ciudad aficionada al diggin’, sino con los propios vendedores.

    ¡Un saludo!

    1. Tienes toda la razón, los mercadillos son una gran fuente porque la gente no sabe lo que vende. En las ferias, como en todo, hay que saber comprar, y aprendes a base de errores, de comprar un disco a un precio y verlo dos semanas después a la mitad, y esas cosas que nos han pasado a todos. Lo mismo por Internet cuando compras en Ebay o en Discogs a particulares, que intentan venderte discos a precios desorbitados. Con el tiempo uno aprende a comprar y aún así te la siguen clavando a veces jajaja
      Pero lo mejor de las ferias son los stands de tiendas extranjeras que traen material que posiblemente no puedes ver en otros sitios. En mi caso especialmente de rap francés como ya digo.

  2. Joder, eso nos ha pasado a todos, sobre todo cuando eres más novel y te lleva la ilusión de tener y tener. Irte cargado de discos de una feria to ilusionado para luego quedársete la cara de tonto al ver alguno mucho más barato, o no haber caído en sacarlo siquiera de la funda para ver su estado. La experiencia te aporta eso que comentais, pero quita parte de esa inocencia e ilusión con la que llegabas a algunos sitios. Esos nervios y esos pensamientos de ¿y si?

    Estoy con Regaliz que colecciones particulares y mercados FTW, pero en las ferias he encontrado algunas cosas tiradas muy guapas. Aunque son las menos. En general, suele estar la misma morralla que ves feria tras feria tras feria, y eso llega a aburrir.

    Como dice Raquel, lo mejor, los extranjeros, he visto discos en el stand extranjero a 3 pavos, y el mismo en el stand de un español a 15. Misma edición, misma condición. Ole.

  3. Esta a sido mi primera feria del disco con 19 años que cumpliré la semana que viene(en mi caso en Sevilla, muchísimo más reducida), llevo desde los 15 años comprando cd´s de cualquier grupo/artista que me guste por placer, a pesar de la incomprensión de mis conocidos de la generación internauta donde todo esta a un solo click y aun así no he parado por el placer que me da ver como aumenta mi colección. Este año decidí empezar a comprar vinilos con muchísima ilusión, ya que tengo planes de empezar a crear ritmos por amor a esto mediante hardware tipo mpc. En la feria pude conseguir el illmatic, songs of love and hate de Leonard Cohen y emerald tears de Dave Holland por 24 euros todo, lo cual para un estudiante al que no le gusta abusar de sus padres es toda una proeza y aun así me dolió ver pasar un midnight marauders de a tribe called quest, alguno de too short, un stankonia, varias rarezas de sun ra, joyitas de tangerine dream y prog rock en general… Pero eso solo hace que tenga aun mas ganas de seguir buceando en las tiendas, manchándome los dedos de polvo y repasando mi lista mental de prioridades.

    Aquí en Sevilla, entre las juventudes «raperiles» no esta muy extendido el comprar música ni siquiera ven el vinilo como una opción, pero unos pocos intentamos mantener la actitud.

    Un saludo y excelente entrada.

  4. si no encuentras nada de hip hop, compras funk o jazz o rock o heavy o lo que sea….lo importante es salir con algun disco xDDDD y mejor no hablo ni digo nombres de gente que ha grabao videos en mi tienda y en la vida han comprao un puto disco me reservo rajar pq ultimamente estoy bastante tranquilo…solo dire que a mas de uno se le tendria que caer la cara de verguenza……

    y por ultimo maximo apoyo para la juventud como Mark Spliz que a pesar de haber crecido en otra epoca y con otros conceptos de modus vivendi intenta mantener y apreciar lo que es tenerlo en original sea el formato que sea….lastima que hayan pocos asi…pero mejor pocos y buenos que muchos y malos……one love & respect for the real new generation………..

  5. Yo no consumo copias físicas por motivos económicos la verdad y porque realmente no quiero compra algún disco y la pasta no llegue al artista realmente. Si he comprado alguna vez han sido autoeditados.

    De tods formas como lo que más estoy escuchando ultimamente es underground patrio siempre pongo mi grano de arena en conciertos.

    Cuando cobre mi propia pasta otro gallo cantará, supongo.

  6. Buenas!

    Esto va dirigido a la gente de Barcelona y alrederores, ya que veo que entendeis mas que yo. Suelo comprar CD’s (no vinilos) de segunda mano, en Barna normalmente voy a una tienda de segunda mano llamada «Music World» en la calle Rosellón con Enrique Granados, suelo encontrar cosillas de mi gusto (Rock de los 60’s y 70’s, psicodelia y demás). Sabriais decirme donde hacen mercadillos de discos de segunda mano o en qué más sitios puedo encontrar CD’s muy baratos? Soy coleccionista pero bastante pobre, así que me intento mover para comprar los cd’s a entre 1 y 5 euros.

    Muchisimas gracias, y buen artículo!

  7. Hace mucho tiempo que no voy a la Feria del Disco, vamos, que aún ni existían los cd’s.

    Pero tengo una duda, y es que no se si hoy en día hay stands donde te compren vinilos. Tengo una maleta llena de discos de vinilo y por diversas circunstancias me los tengo que quitar de encima. Obviamente no los quiero tirar, Ni loco!!!, pero tampoco se donde venderlos a un precio justo… He ido a preguntar a los de Cash Converters y eso es un robo… por eso pregunto si en la Feria del Disco de BCN puedo encontrar alguien que esté interesado.

    Saludos.

    1. Hey Xavi y no has pensado en hacer una relación y venderlos por unidades? yo igual estoy interesado si me la mandas :DD

      El artículo es muy interesante y como bien se dice el tema de ferias de discos está en las últimas… en ciudades más pequeñas ya ni se plantean organizarlas.

      Saludos.

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